Capítulo 15

Perdón por no subir, pero se me complica un poco la cosa.. lo siento de verdad... aquí les dejo el capi... Besos!!!!

_______________________________

- Te amo Peter. – le dije.

- Te amo, Lali – respondió.

Después de eso nos besamos, me di vuelta y él me abrazó cucharita, abrazándo y acariciando mis brazos… con sus caricias y ese cosquilleo de sentirlo así de cerca, me dormí más feliz que nunca.

CAPÍTULO 15

Cuenta Peter

- Día de fin de año… un día más que pasé con vos, y un día menos para que te vuelva a perder – dije susurrando para no despertarla mientras acariciaba con suavidad su cara – Te prometo que vas a pasar unas navidades inolvidables mi amor, y te prometo también que cueste lo que me cueste van a ser las primeras de muchas que vamos a pasar juntos.

Sin despertarla, la besé, me levanté y me fui a la cocina a prepararle un desayuno para llevárselo a la cama y tratarla como una reina. Mientras lo preparaba pensaba en la idea de Euge de conocer a la familia de Lali. Me lo había tomado a broma, pero ¿y si a sus padres no les gustaba la idea de que su hija andara con un famoso? Quizás no se lo dijera en el primer momento, pero tarde o temprano se enterarían. Era un TEMA lo de conocer a su familia, pero era algo parte de ella y yo quería formar parte de su vida también y haría lo que hiciera falta para seguir con ella…. incluso conocer a mi suegro.

Cuando tenía el desayuno listo, lo puso en una bandeja y lo llevé al cuarto. Dejé la bandeja a los pies de la cama con cuidado y me acerqué a ella para despertarla.

- Buen día hermosa! – le susurré al oído y después comencé a darle besitos por el cuello, los hombros, para volver a subir hasta su cara y comenzar a besarla también, hasta que uní nuestros labios.

- Buen día no, excelente día si me despiertas así… - me respondió y vovlió a besarme.

- Pues ve preparándote porque esto se va a repetir muchas veces, te lo prometo. –le dije, la besé y me volví a separar de ella – para mí eres una princesa, así que hoy desayunás como tal – le decía al tiempo le acercaba la bandeja.

- Mi amor!!! – me dio un eso – que buena pinta tiene todo Gracias Peter

- No me tienes que dar las gracias, lo hago porque te amo y no quiero nada a cambio – y la besé – aunque pensándolo mejor quiero algo.

- ¿Que quieres que te dé a cambio del desayuno encamado? – me dijo acercándose a mí y quedando nuestras bocas a centímetros.

- No quería un beso, pero si insistes – y la besé atrapando sus labios en los míos – lo que quiero es que después desayunar te vistas y vayamos a dar un paseo mañanero por la playa, los dos juntos.

- Si ese es el pago, prepárame todos los días el desayuno – y me sonrió.

Desayunamos, y después nos vestimos y salimos a dar un paseo… eran las 9:30 am, no había apenas gente en la playa… Íbamos los dos caminado por la orilla, yo pasaba mi brazo por su espalda, y ella abrazada mi cintura. Estuvimos un rato caminando así en silencio, hasta que Lali rompió ese silencio.

- Que lindo que es Pitt, ¿viniste muchas veces aquí? – me preguntó Lali

- Si varias veces… en realidad es raro el verano que no vengo. Primero vamos con mis hermanos y mis papás a algún sitio, y después me voy con los mis amigos a seguir de vacaciones – le respondí.

- Así que después de estar con tus padres, venías aquí para piratear con tus amigos ¿no? – me dijo separándose de mí y caminado un poco más rápida delante de mí.

- ¿Estás celosita? – dije quedándome quito, pero al ver que ella siguió caminando, corrí un poco hasta alcanzarla y la abracé por detrás – lo de piratear lo dijiste vos, no yo.

- Pero no lo negaste – me respondió con tono serio.

- No, no lo negué… no te puedo negar que me gusta salir de fiesta y pasarla bien con mis amigos, y alguna que otra vez sí que estábamos con alguna minita, pero con ninguna pasó nada – le respondí y comencé a besarla por el cuello.

- No es justo, sabes que haciéndome eso me aflojas – dijo dejándose llevar por mis besos y dándose vuelta – Un poco de celos si me da, pero no te puedo reclamar nada porque no estábamos juntos.

- Pues no… pero me gusta que te pongas celosita… y también me gusta que mis beso te aflojen – comenzamos a besarnos, los besos que empezaron siendo dulces y tiernos, se fueron dando cada vez más rápidos y con más fuego… besos que fueron interrumpidos por mi gran amigo Nico, al que estuve a punto de matar.

- Epa!!!!! Nos despertamos calentitos Pitersito? – dijo Nicolás al vernos a los dos tan juntos y besándonos tan fogosamente.

- No, simplemente besaba a mi novia – le respondí – Hola Euge – me acerqué a ella y la saludé – ¿Ustedes?

- Nosotros vinimos a pasear un ratito por la playa, y Nico los vio a lo lejos y como es un patoso pues vino a molestarlos, a pesar de que yo me negara – dijo Euge haciendo la que estaba mosqueada con Nico por lo que acaba de hacer.

- Sos una buchona rubia!! Igual así y todo te amo – le dijo Nico y la besó.

- Bueno!!! – dijo Lali separando a Nico y Euge de sus besos pegajosos – no sean tan empalagosos los dos.

- ¿Esto es venganza porque yo recién te corté el mambo no peti? – dijo Nico y recibió por mi parte un pequeño porrazo en su cabeza – Auch… no me pegues yo solo dije la verdad.

- ¿Bueno volvemos? – dijo Euge – son casi las 11 ya y quizás los chicos nos esté buscando.

- Sí, Euge lleva razón.. vamos amor – me dijo Lali, después me besó y volvimos de nuevo al hotel.

Habíamos caminado bastante, tardamos casi una hora en volver. Cuando llegamos Rochi estaba por llamar a nuestro apartamento.

- ¿De dónde vienen los cuatro? – dijo Rochi y después nos saludó a todos.

- De dar una vueltesita por la playa – dijo Lali - ¿vosotros, os habéis levantado hace mucho?

- No, Gastón recién se está vistiendo. Cande y Vico están buscando algún sitio para ir a comer después. – Respondió Rochi.

- Bueno, yo creo que sé donde podemos ir – les dije a los chicos.

- Cierto que como viene aquí prácticamente todas las vacaciones de verano, pues se conoce esto muy bien – dijo Lali con tono celoso otra vez, a lo que yo respondí con muchos picos.

Después de eso, estuve hablando con los chicos explicándole donde íbamos. Era un restaurante con comida típica del país que estaba en el centro de Punta. Cuando se acercó la hora, nos montamos en los 2 coches y fuimos al centro. La tarde pasó muy entretenida… la comida estaba riquísima, y además la pasamos muy bien entre charlas, bromas y risas. A penas llevábamos un par de días de vacaciones, pero era raro que nadie nos hubiese reconocido, hasta esa tarde. Cuando salíamos del restaurante, unas cuantas chicas se nos acercaron pidiendo fotos con Nico, Gastó y yo, y no nos podíamos negar. Aunque estuve pendiente a la cosas que decían las chicas, no perdía de vista a Lali y vi como siguió caminando con Euge hacia delante, en vez de pararse y esperarnos como hicieron Rochi, Vico y Cande.

Después de eso, nada fue igual… yo me acercaba a ella para dale mimos, y aunque no se negaba a recibirlos, no me los correspondía. Estaba más que claro que no le había gustado eso.

Eran casi las 4:30 p.m. cuando volvimos al departamento. Lali seguía igual de seria.

- Voy a dejar las cosas en mi apartamento y vuelvo para lo del Skype con tus padres ¿si amiga?  - le dijo Euge. La verdad no sabía que es lo que iba a responder.

- Ok, las espero… Cande Rochi vénganse también, seguro que las niñas estarán encantadas de verlas – respondió ella abriendo la puerta y entrando en el apartamento.

Se dirigió al cuarto y cerró la puerta, definitivamente tenía que hablar con ella.

- Lali? – dije llamando a la puerta despacio y como no recibí respuesta entré. La ví sentada a los pies de la cama, con la cabeza gacha – Mi amor, sé que no te gustó lo que pasó hoy a la salida del restaurante, pero yo no tengo la culpa y tampoco puedo evitarlo – le dije arrodillándome ante ella para quedar a su altura.

- Ya lo sé – dijo mirándome – pero yo tampoco tengo la culpa y yo tampoco puedo evitar reaccionar así – me respondió.

Se levantó de la cama y tomó del armario ropa para ponerse después de ducharse y aunque intenté frenarla no quiso parase y se metió en el baño, cerrado la puerta.