Capítulo 30

HOLAA!!!!! Como les promtí aquí tienen, capi nuevo.... les subo porque así les dije que iba hacer un día sí, uno no... porque a penas firmaron 6 personas.

Gracias a las que leen, y mucho también a las que firman, por dedicarse aunque sea unos segundos a comentar =) gracias de verdad.  Gracias a Bego, Faty, ca_amorlaliter, Chari, Arii y Laliter ... chicas pasen por su blog http://laliteresunsentimiento.blogspot.com.es/ está muy bueno =)... me gustó mucho el corto. Capi dedicado a cada una de vosotras por comentar siempre, y especialmente a Bego, por ser la primera en firmar.

Haroa les dejo el capi de hoy, mientras voy a leer la nove de Faty... muy buena http://nohaytalcrisisnovelas.blogspot.com.es/

GRACIAS a todas y besos!!!!!!!!!!!

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CAPÍTULO 30

Cuenta Lali

- Es que parece que es de la única que nos escucháis – contesté. Me levanté y me fui a la cocina. Noté que mis padres venían detrás.

- ¿Me puedes decir que narices te pasa Mariana? – me dijo mi padre.

- ¿A mí? Que no nos escuchan… acepten de una vez que crecimos… ¿te suena eso “crecer, volar y dejar el nido” papá? – le dije algo irónica.

- Sí, pero no me creo que en dos meses tu “nido” sea Buenos Aires. – me respondió.

- Pues lo creas o no, así es… además los dos sabíais perfectamente que mi intención nunca fue quedarme en España para toda la vida. ¿Qué te importa qué país sea? – le contesté cada vez más enfadada.

- EH!! – dijo mi madre para intentar calmar los nervios. – Vamos a tranquilizarnos todos y bajar el tono… vamos a ver Lali, el caso no es el país, sino el momento… no te puedes ir YA… ¿qué pasa con los estudios? ¿qué pasa si tu noviazgo con ese chico no sale como planeas? – me preguntó mi madre.

- Con mis estudios, no pasa nada… allí hay facultades y los puedo seguir allí… y para tu información yo sí confío en mi relación con Peter… Mamá no es un capricho, me conoces… es la primera vez en mi vida que me enamoro.- le contesté con sinceridad.

- Eso dijiste cuando estabas con ese Carlos…- contestó mi padre – y sí es la primera vez que te enamoras, ¿cómo estás tan segura que lo que sientes es amor? – habló mi padre.

- AAHH!!! ¿Cómo estuviste tú seguro de que estabas enamorado de mamá? Habéis contado miles de veces que ninguno habías tenido ninguna otra relación antes de conoceros…. – le respondí. Mi madre puso cara de “mi hija tiene razón”, pero no iba a dármela.

- Eran otros tiempos… - dijo él. Odiaba esa respuesta,

- Sabes cómo odio esa respuesta… sí eran otros tiempos, el amor de ahora es menos posesivo que el de antes, gracias a Dios. ¿y sabes porque sé que estoy enamorada? Porque me imagino una vida Peter, aquí, en Argentina, en el Congo… en donde sea papá. Pero sé que él tiene su vida hecha allí, y yo recién estoy empezando a crear la mía….

- Lo que me faltaba… tú tienes menos que perder que él… ¿y tú familia? ¿tus amigos? – me dijo más frustrado que enfadado.

- La niña no dijo eso Gonzalo…ella tiene razón. Ese chico es un actor que aunque lleva pocos años en ese ámbito, todo el mundo le augura un futuro prometedor. – contestó mi madre. No podía creerlo me estaba apoyando.

- Gracias mamá. Papá, son muy importante para mí: tú, mamá, mis hermanas… todos. Pero ahora dime una cosa ¿Qué hubieses hecho tú si cuando decidiste estar con mamá, casarte con ella y formar tu familia, mis abuelos te lo hubieran impedido? – le pregunté. Necesitaba que me entendiera.

- Hubiese defendido en lo que creía – dijo con la cabeza baja.

- Mira qué casualidad que hasta en eso me parezco a ti… es lo único que estoy haciendo yo ahora papá, defender en lo que creo. – le dije.

Se acercó a mí, me abrazó y me dijo – No quiero que sufras, y es lo único que se me viene a la cabeza si te imagino con ese chico. –

- Y… es lo que tienen las relaciones, que no todo es color de rosa, ni cuento de hadas… pero eso me va a pasar con Peter o con cualquier otro chico. – le dije.

- Como me gusta verlos así – dijo mi madre. Mi padre estiró su brazo y la unió al abrazo.

Después de unos minutos viviendo ese momento con mis padres, fuimos al comedor… allí estaban Euge con sus padres y su hermana, y mis hermanas también.

- ¿Ya? – preguntó Bea cuando nos habíamos sentado – ¿se acabaron los gritos? – dijo molesta. Odiaba que discutiéramos… creo que además de tener en común con Rochi lo de la fotografía, se llevaba muy bien con ella porque se parecían mucho: las dos eran muy tranquilas, relajadas, positivas, etc.

- Sí, perdón Bea… te prometo que por mi parte no volverás a escuchar un grito… al menos que sea para buscarte a ti… es bromita hermanita – le dije.

- Bueno… ¿y nuestros regalos? – preguntó María.

- En las maletas….Ven Lali vamos a buscarlos, están ansiosas!!! – dijo Euge mientras no levantábamos y reíamos. Llegamos al cuarto.

- ¿Está todo bien con tu padre? – pregunté a mi amiga.

- Sí, bueno más o menos… le dije a los dos todo lo que quería para mi vida. Mi madre me apoyó, pero mi padre… mi madre me dijo que necesita asimilar todo lo que le dije – me contó Euge y la abracé.

- Antes de lo que te imaginas estará todo bien… tu padre no soporta ni una hora sin hablarte, mirarte o mimarte. – le dije

- Ojala tengas razón ¿Y tus padres? – me preguntó.

- Bueno, me costó… pero los dos entendieron que amo a Peter y que aunque lo que tengo aquí es importante para mí, ahora mi prioridad es él… es estar con él. Aunque la verdad, sé que no están conformes ni mucho menos de acuerdo con mi decisión. – le dije.

- Bueno vamos que si no las enanas nos vienen a buscar – dijo ella y entre las dos llevamos los regalos al salón. Llegamos y estaba sentados todos entre los dos sofás de mi casa.

- Aquí estamos con los regalitos – dijo Euge.

Empezamos a repartirlos…. Eran pequeños recuerdos… para las niñas eran camisetas con estampados de algunos sitios conocidos de Argentina y también de Punta del Este. Para nuestros padres fue más complicado elegir… a mi madre un recetario con típicas comidas argentinas, a la madre de Euge un bolso con fotos de sitios emblemáticos de Argentina. A mi padrino y a mi padre una camiseta para cada uno de la selección argentina… Amaban el fútbol y se habían propuesto conseguir todas las camisetas oficiales de todas las selecciones de fútbol posible.

Después de eso Euge se fue con sus padres y su hermana para su casa, tenía que acomodar sus cosas: deshacer la maleta, básicamente… y yo igual. Así que me fui a mi cuarto, lo recogí (hice las camas y lo ordené un poco) y me puse a deshacer la maleta. Bea me ayudaba y mientras le fui contando TODO lo que me pasó con Peter… aunque ciertas cosas sin muchos detalles, tenía 16 años, no se iba a escandalizar, pero eran cosas, detalles, momentos que quería guardar solamente para Peter y para mí.

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Arii tenías razón, no se lo tomaron muy bien... pero creo que un poco mejor que los de Euge. Chari, tienes razón, es duro para los padres dejar que sus hijso se vayan, y más este caso que es tan lejos.... pero es su felicidad, lo único que hay que esperar es que sus padres y madres las apoyen a ellas dos. 

BESOS!!!!!!!!

Inma