Capítulo 31

BUENAS BUENAS!!!! ¿Cómo pasasteis el último domingo de este año?  Espero que bien y que hayáis pasado un buen domingo, aunque tienen fama de aburridos... para mí no lo son para nada =)

Y bueno... aquí os dejo el capítulo de hoy =P Espero que disfrutéis de él tanto como yo al escribirlo. He leído y recibí comentarios sobre el momento "esposas" quien sabe... quizás más adelante jajajaja XD. Pues lo dicho que disfrutéis de lo que queda de domingo =)

El cap de mañana lo más seguro es que lo deje programado, por si mañana me veo sin tiempo para subirlo... por eso quizás no pueda avisar por twitter. Muchos besos para todas! MUACKS 

@Inma_06

Capítulo 31

- ¿Estás mejor ya? – le preguntó Peter dándole la taza con el segundo té.

- Sí, gracias a vos sí – agradeció una vez más Lali dando un sorbo al té, ya no lloraba.

- Basta Lali deja de agradecerme – dijo Peter serió y se levantó a atender el teléfono que había empezado a sonar – ¿Hola?. Si Javi está mejor… Ok ahora le digo. Gracias por llamar. Chau

- ¿Qué te dijo?

- Que cree que sí mañana estás así de intranquila no deberías ir a trabajar.

- Voy a ir a trabajar – advirtió Lali.

- Eso lo discutimos en otro momento. Ahora vengo – dejó un beso en su frente y fue hacia el baño, abrió el grifo y dejó llenándose la bañera – Vamos.

- ¿Dónde?

- Está llenándose la bañera, te vas a dar un largo baño para que te relajes.

- Te amo – dijo ella sonriendo por primera vez después que le dieran la noticia, se puso de rodillas y besó a Peter que estaba de pie detrás del sofá.

- Sos lo mejor que me pasó en mucho tiempo sábelo – respondió Peter y volvió a besarla.

Juntos fueron hacia el baño y mientras Peter terminaba de prepararlo echándole sales y encendiendo alguna que otra vela, Lali se desvestía. Cuando todo estuvo listo, la ayudó a meterse en el baño y comenzó a masajearle los hombros y el cuello, haciendo que ella se relajara.

- Lali – titubeó Peter y ella se volteó para mirarlo - ¿ahora cómo sigue todo? – preguntó dubitativo.

- Pues si lo detuvieron, supongo que estará en prisión sin fianza hasta que el juicio salga, y cuando eso pase pues seguramente tendré que ir a testificar.

- Pero antes de eso ¿no tendrías que asegurar que es él?

- Sí, pero para eso puedo seguramente hacerlo online, no creo que me hagan ir hasta allá para pasar la rueda de reconocimiento y luego esperar e juicio, porque seguramente tarden un tiempo en juzgarlo.

- Yo voy a estar con vos en todo momento – dijo Peter arrodillándose al lado de la bañera y agarrando la cara de Lali – siempre… y quiero que cuando el momento de ir a España para el juicio me gustaría que me dejaras ir con vos.

- Sos increíble Peter… y por supuesto que quiero que vengas, sos indispensable para mí. Te amo – aceptó ella y lo besó, pasando sus manos por el pelo de él y mojándolo.

Lali estuvo un rato más en la bañera, acompañada por Peter qué a pedido de ella terminó bajo el agua también. Peter logró que la noticia que le habían dado Lali, fuera completamente buena, porque aunque ella sabía que lo era, no podía evitar recordar todo lo que había vivido en España.

- ¿Crees que algún día pueda olvidar lo que pasó? – preguntó Lali mientras se secaba el pelo ya tapada con el albornoz, frente al espejo.

- No sé – contestó Peter mirándola por el espejo, ya que estaba tras ella – Espero que sí, ojalá que lo olvides. Pero creo que está en vos eso; por doloroso, triste y feo que es lo que te pasó depende de vos que te siga doliendo – le dijo Peter y la abrazó.

- Pero me marcó para siempre – respondió ella devolviéndole la mirada también por el espejo.

- Pero no te impidió estar conmigo – respondió el sonriendo y dando un beso al cuello de Lali – Te marcó para siempre pero no te impidió seguir con tu vida. Quizás cuando declares en el juicio y sepas que nunca más vas a saber de ese tipo, puedas olvidarlo todo.

- Espero que sea así como vos decis – respondió Lali y se dio la vuelta para mirar a Peter frente a frente – Y si pude estar con vos es por todo lo que me diste, porque me convenciste de que el amor si es bueno y lindo, que somos las personas quienes hacemos que duela y que parezca que el amor es sufrimiento.

- Te salió la vena de psicóloga – dijo Peter secando las lágrimas que de nuevo salían lentamente de los ojos de Lali – Me alegra haberte hecho ver y saber que el amor siempre es lindo… y para mí, vos lo convertiste en algo único – reconoció Peter y besó a Lali.

Poco a poco pasaron del baño a la cama, aun ambos estaban con la toalla y el albornoz solamente. Se acercaron a la cama y poco a poco se fueron quedando de nuevo desnudos, aun con algunas gotas de agua resbalando por sus cuerpos.

Peter tumbó a Lali en la cama, y comenzó a besarla por la frente hasta llegar a su ombligo, pasando por los ojos, nariz, mejillas y pechos. Con cada beso y lamido Lali se estremecía por el deseo que se producía en su interior. Era increíble como cada vez que volvía a hacer el amor con Peter descubría algo nuevo de él, o incluso de ella misma… descubría sensaciones nuevas. Peter seguí recorriendo todas las partes de su cuerpo, hasta que volvió de nuevo a su boca. La besó con fervor, locura, pasión y amor. Es beso la hizo sentir que era única, que era la única mujer que él quería estar en ese momento… y para toda la vida.

- Te amo Peter – dijo separándose de su boca y haciéndolo girar hasta quedar sobre él – gracias por amarme así – y Lali sintió que era su turno.

Empezó besando los labios de Peter, su cuello, el lóbulo de su oreja izquierda… Comenzó a bajar besando el pecho y la panza de Peter y pudo sentir como su erección crecía contra ella. Se sentía increíblemente genial provocando ese deseo en Peter. Siguió bajando hacia el miembro de Peter y comenzó a acariciarlo, cuando estaba acercando su boca a él, Peter haló cuidadosamente de Lali hacia él.

- Sí haces eso no voy a poder controlarme hermosa… necesito ya estar en vos – le aseguró él. Giró a Lali, se subió en ella y poco a poco fue introduciéndose en ella, al tiempo que Lali lograba seguir el ritmo de las embestidas de Peter y Peter no paraba de viajar de su boca a su cuello repartiendo besos. Ambos gemían y disfrutaban de aquel pasional y amoroso encuentro.

Peter quería demostrarle a Lali todo el amor que ella había despertado en él, demostrarle que no le importaba su pasado, que no tenía por qué afectarle a su presente… que él se iba a encargar de hacerla feliz por el resto de sus vidas.

Cuando ambos llegaron al punto máximo de placer, Peter se dejó caer en el cuerpo de Lali extasiado,  mientras ella posaba sus manos en las espalda acariciándola para intentar calmar su respiración, a pesar de que la de ella estaba igual de agitada o más. Peter salió lentamente de Lali y se tumbó de perfil junto a ella en la cama.

- Te amo tanto – le dijo mirándola a los ojos  y acomodando los pelos que debido al sudor, estaban pegados en su frente.

- Yo también te amo – respondió ella y acción su mejilla – gracias.

- Otra vez no Lali – dijo él quejándose por su continuo agradecimiento.

- No te estoy agradeciendo por esto – dijo ella sonriendo y rozando sus labios con los de él – gracias por curarme el corazón.

Peter murió de ternura y amor en ese instante, en el cual la atrajo hacia él para besarla de nuevo y descansar un rato de ese día, que no había pasado de la una de la tarde pero había sido muy intenso.